Me encontraba acostado en una cama, me sentía muy débil, tenía el pelo corto, mi barba había desaparecido y mi cuerpo era casi lampiño. En realidad no era mi cuerpo, ya que era un cuerpo débil y de contextura muy delgada, en extremo delgada. Mi piel tenía un blancura aséptica.
En un momento dado me desesperé, recordé toda mi vida y tuve la sensación de que todo había sido un sueño, como que me había encontrado en un estado de coma desde que nací. Toda mi vida, mis recuerdos, mi familia, mis amigos, mis estudios, mi trabajo... Tuve la extraña sensación de que nada de eso había existido jamás en realidad. Que sólo habían sido un producto de mi mente estacionada en un largo sueño REM.
Al momento de darme cuenta de todo esto, escucho un extraño zumbido proveniente de un aparato situado sobre una especie de soporte al lado de mi cama. De éste salía un cable que en su extremo tenía un electrodo que a su vez estaba pegado en mi muñeca izquierda. El aparato no parecía de fabricación humana, digo, era muy extraño. No tenía botones, solo tenía una luz azul que había empezado a titilar al momento que escuché el extraño zumbido.
Pocos instantes después se abre una puerta automática oculta en una de las paredes de la habitación. Entran dos hombres realmente altos, de contextura física robusta, arios, cabellos rubios casi blancos, ojos de un azul profundo. Me miran, uno pasa hacia la cabecera de la cama, empieza a deslizar la cama suavemente, está tenía una especie de rueditas en las patas. El otro tan sólo me mira y va a mi caminando a mi lado.
Salimos por la puerta. Del otro lado, y al cerrarse la puerta de forma automática, distingo unos símbolos escritos sobre la misma.
Yo no podía hablar, me refiero a que no me salía la voz, no podía modular las palabras, mi cerebro enviaba las frases que surgían de la sinapsis de mis neuronas pero nada salía de mi boca.
Vamos por un largo pasillo, todo era luz blanca, no distinguía los vertices de las paredes con el suelo, todo parecía ser una gran masa de luz, sin embargo la cama se deslizaba sobre algún tipo de superficie, y mis acompañantes pisaban firme sobre lo mismo.
Se abre una puerta, un extraña luz gris se proyectaba desde esta nueva habitación. Entramos. Me dejan frente a otra puerta de aspecto metálico, uno de ellos se sitúa atrás de lo que parecía ser un holograma de un tablero de funciones con botones virtuales, cada uno de ellos formados por proyecciones de luces de distintos colores.
Se abre la puerta metálica delante de mi. El otro empuja la cama hasta dejarme en lo que parecía ser una especie de ascensor fuertemente iluminado. Retrocede nuevamente hacia la habitación. Se cierra la puerta de aspecto metálico, me encuentro nuevamente solo dentro de aquél cubículo de luz.
Siento temor, no, más bien preocupación.
No percibo que lo que yo suponía era un elevador se moviese, no noto que ascienda ni tampoco que descienda. Ahora se escucha otro zumbido. Me mareo, mi visión se nubla, mi mente empieza a bombardear imágenes de cuando me estaba levantando hoy a la mañana en casa, de cuando salía hacia la oficina.
Abrí mis ojos, de vuelta siento que me llevan por el pasillo de luz de vuelta hacia la habitación en donde desperté originalmente.
- Es el cuarto "despierto" que tenemos en menos de dos kines -le dice uno de los hombres al otro.
- Algo extraordinario está pasando, aunque todavía falta tiempo.
- Son señales, están empezando a despertarse de a poco.
Levanto mi mano y le tomo la muñeca a uno de aquellos tipos. Seguía sin poder hablar.
- Tranquilo -me dice- ya falta poco para que conozcas la verdad.
Todo se nubla. Caigo a esta realidad. Abro mis ojos. Soy yo nuevamente, es mi cuerpo, toco mi cara, mi barba, mi pelo largo.
Me encuentro que estoy logeado al blogger escribiendo esto.
Que alguien me explique -por favor- porqué me está pasando todo esto.
3 comentarios:
Quizá es el efecto del estudio exhaustivo de Waking Life, que está provocando que te vuelvas un poco Wiley...
Quizá la próxima vez que despiertes te veas pintado en acuarelas...
Quizá pases por mi casa y me encuentres haciendo cuentas, pensando en términos químicos y charlemos un poco sobre alguna visión de la vida...
Quizá ya no puedas despertar por segunda vez... pero vuelve al blog, así sabemos cómo es seguir del lado acuarelado... =)
PS. Si, tengo manías con los quizá...
La próxima vez "que salga" paso por tu casa... Si puedo te aviso antes por mail, por las dudas tené siempre el mate preparado...
:)
avise avise... acá el mate es el mejor intermediario para unas charlas... uh! qué buena escena para waking life!!!
;)
Publicar un comentario