miércoles, julio 13, 2005

Freedom fighter

The orders arrived quite late that afternoon. The US-AF-403 tank and crew were lying down by the side of the road, sucking up the last rays of the iraqi sun, when the radio finally spit out the mission briefing. The missives were clear, they would have to protect a caravan of trucks loaded with oil that would leave a refinery near Fallujah later that night.

It was nothing but routine, they all thought, no big deal. They did the same move hundreds of times before and they never experienced an incident, but that was all about to change, even before the mission started.

A group of six women and a little boy were crossing the road just in front of the tank, ignoring it at all, when a soldier whistled to one of the women in a disrespectful kinda sexual way. A camera man, member of the crew from a french news channel, was capturing the whole scene in beta (just for backup footage) one hundred meters away from the tank. The women started to scream in their language, an arab dialect, in response to the soldier's offense. All the troopers were still laughing at the women when the captain emerged from the steeled bowels of the tank and ordered them to cover up their posts in order to start the trip to the refinery. But the fact was that the women didn't move aside, they were still in front of the tank blocking the road.

Captured in a rapt of madness the captain came out from the tank's upper scuttle and shot at one of the women right in her chest with his gun. The point of no return was crossed once again as many times before, and the simple statement "for each action there is a reaction" was about to be proven again once more.

The rest of the women began to yell even louder than the first time and they started picking stones from the side of the road. The little boy knelt down in the floor for a moment next to his mother's bleeding body while the other women began to stone the tank. The boy took a very good look at the blood in his hands, and all the impotence, all the hate, all the sorrow mixed up with his mother's blood became a stone, a stone that he threw and blew off the captain's head like no other stone ever done it before. Then, a deep silence took place in the scene, it was silence product of an add of other differents silences: The silence of the crew, the silence of the women, the silence of the camera man filming the whole situation and the silence of the boy.

Later that night a news channel in France broadcasted the whole footage of the incident and millions of viewers all over the world were captured by that same silence, a silence dressed up in wisdom that was intended to show us something, something for us to learn. However, a few minutes later when the transmission was over, everything continued the way it was before, and in one hand some people saw in that boy the born of a future terrorist, and in the other, some people saw the consummation of a freedom fighter.

8 comentarios:

juanba dijo...

Sí, sí, ya lo sé... No sólo no me basta con faltarle el respeto a Cervantes sino que ahora también se lo falto a Shakespeare posteando en inglés ¿Y qué?

:)

Anónimo dijo...

Pues que alguno te verá como un terrorista y algún otro como un libertador. Todo tiene dos caras y no es fácil saber cuál de las dos es en realidad el culo. ¿Y qué? (Haz lo que te venga en gana, que no hay otro camino).

juanba dijo...

Eduardo: Es verdad, y también está la vieja parábola de "Dale muerte a un hombre y serás un asesino, dale muerte a miles y serás un conquistador".

Te tomo el consejo de la frase entre paréntesis, y sí, otra no queda.

Salutes

Adriano dijo...

Es muy actual la temática, muy gráficas las escenas, el impacto que le quisiste dar. La duda queda. Dualidades que se disocian. Por un lado, terrorista, por el otro, libertador. ¿No pueden ser ambas a la vez?.

Porque el terrorista, pienso yo, se cree libertador de algo, de su propia causa al menos. Y el libertador es capaz de llevar hasta el extremismo su ideal.

Me gustó el texto. Está bueno también que sea en inglés. Sirve para practicar un poco la lengua. Tardé bastante en leerlo, pero me resulta muy interesante que sea en otra lengua que conozco. Me gustaría a mí también poder hacerlo, pero aun me faltan ciertos conocimientos.

Saludos.

juanba dijo...

Adrían: Gracias por el comentario. La verdad es que no hay verdad absoluta en este tema tan actual, sólo hay distintos puntos de vista, yo sólo me dedico a contemplar sin juzgar, que creo que es lo más sensato, al final todo termina siendo causa y efecto, acción y reacción y que cada cual llegue a sus propias conclusiones sobre lo que está ocurriendo en el mundo hoy por hoy.

Algún día animate al post en inglés, es cuestión de ser algo caradura como yo, y a mi también me faltan más conocimientos; estaba bastante oxidado con el tema de escribir en inglés y cuando empecé el relato me di cuenta de ello.

Salutes

Anónimo dijo...

Muy bueno el texto Juanba.
Lo que me sonó terrible, es eso de que un silencio vestido de sabiduría haya asaltado al mundo al ver las imágenes. Me pareció terrible, porque es muy triste ver como siempre hace falta que pase algo horrible para que la gente pare a pensar cinco segundos lo que está viendo, aunque después siga todo como antes. Esa indiferencia (estimulada por supuesto por los medios de comunicación), esa resistencia a lo grave de la realidad, es algo monstruoso.

juanba dijo...

Martín: Lo del silencio fue como una imagen que me vino a la cabeza en ese momento; millones de televidentes en silencio observando lo que ocurría en las imágenes televisadas. En cuanto a lo de la sabiduría de la que va vestido el silencio es porque creo que es muy correcto ese dicho sajón que reza "Silence is golden", porque es sólo en silencio, en la quietud y en la ausencia de ruidos, cuando nos paramos a reflexionar sobre los que nos pasa, aunque después viene esa resistencia de la que hablás, la resistencia a reconocer lo que está mal y actuar en consecuencia para corregirlo, y el no actuar en consecuencia termina deviniendo en esa indiferencia a la que te referís en el comienzo de la última oración de tu comentario.

Con respecto a lo de: "...es muy triste ver como siempre hace falta que pase algo horrible para que la gente pare a pensar...", yo observo que esto es así, y dejando de lado el tema puntual del post, creo que en nuestro país somos expertos en eso, en que pase lo terrible, en siempre llegar a los extremos para luego actuar en consecuencia, nunca antes el preveer, el prevenir.

Salutes

Anónimo dijo...

En Argentina somos un montón de boludos quejándonos de la injusticia puesta de moda por los medios de comunicación. Pero cuando ya no te lo pueden seguir vendiendo, cambian de tragedia, de injusticia, de chivo expiatorio, y todos atrás corriendo con las pancartas a quejarnos al otro ministerio, o a la otra casa, o a la otra comisaría, que queda acá nomás a una cuadra.
¿Y lo anterior? Ah, no sé, ya ni me acuerdo qué era lo que había pasado antes, ahora hay que quejarse por esto. Mañana vemos.