El haber entendido realmente lo que ocurría fue lo que la impulsó.
Era una fría mañana de otoño. El reloj marcaba las nueve y cuarto cuando ella salió al balcón. Su camisón de seda color rojo punzó flameaba violentamente a causa del fuerte viento matinal. Fue el hombre que ocupaba la habitación contigua el que la vió traspasar la baranda del balcón, dando inmediatamente el aviso a la recepción. Cuando Miguel Ordoñez, jefe de seguridad del hotel, y un joven botones lograron derribar la puerta ya era demasiado tarde. Ordoñez, al encontrar la habitación vacía, sólo atinó a tomarse la cabeza para luego bajar nuevamente al lobby del hotel. Sólo el botones tuvo el coraje de salir al balcón y asomarse para ver. Y entonces fue que la vió, ella ya era sólo una pequeña mancha rojo punzó.
Ahora bien, creo que has entendido mal porque has supuesto mal. Ella era la mancha rojo punzó, sí, pero ascendiendo para desaparecer entre las nubes de aquel ventoso día, de aquella fría mañana otoñal.
El haber comprendido realmente lo que ocurría fue lo que la liberó.
13 comentarios:
Pero si quieres volar
-me decían las gaviotas-
¿qué tanto puedes pesar?.
Te llevamos entre todas.
Allá abajo los amigos
se empezaron a juntar.
¡Mi ropa estaba en la arena
y yo no estaba en el mar!.
"Gaviotas" Cortez, D. Alberto, claro.
Buenísima selección Aquende, va justo con el post.
Salutes
La muerte y el suicidio es un tema tan (preocupantemente) recurrente en todo lo que leo ultimamente que tengo que reconocer que yo también lo entendí mal.
Muy bonito, Juanba.
Ya sé que me cargo la poesía de la historia, pero no puedo evitar pensar que si ella ascendía y sólo vestía un camisón de seda, el botones asistió a todo un espectáculo.
Mis disculpas, es que llevo muy mal día.
wow... este si me voló la cabeza!
yo soy de los que quedaron mirando para abajo, que bolú...
Me comí el amague, yo también. Pensé que se trataba de la temática similar que impulsó aquel texto en el que descendías desde el quinto o sexto piso - no recuerdo bien en este momento -, o aquel post en que alguien acaba con su vida arrojándose desde un puente.
Me has sorprendido. A todos, creo yo. Volar es el mejor escape. Tanto lo soñamos que a veces pienso que si pudiéramos concretarlo, sentiríamos un pánico similar al que, por ejemplo, puede ocasionar intentarlo.
¿Y cómo es el rojo punzó?. Saludos.
El tema y la historia son muy bonitos, pero te han salido algunas rimas que me estropean la lectura.
Martín: Bueno, esa era la intención, desubicar un poco, onda que no demos todo por sentado.
Eduardo: Jajaja... Vale el comentario, estuvo bueno, pero lamento desilusionarte como se desilusionó el botones: la mujer llevaba puesta ropa interior.
Daniel: Ud. no es ningún bolu... Si fuera así creo que todos los que leyeron y cayeron en la "trampita" lo serían y nada que ver. Gracias por los elogios.
(Ah y no me olvidé, sigo cocinando al Quijote envuelto en una catátrofe climática)
Adrián: Coincido, los sueños en que podemos volar son los mejores por lejos. El rojo punzó es un rojo fuerte, sí, justo ese que estás imaginando.
Ana: No es poesía, no sé a que te referís con eso de las rimas, acordate que yo no tengo idea de técnicas, métricas, estilos y qué se yo, sale lo que sale. Te propongo algo: cambiá o corregí lo que creas de la historia y mandámela al mail, en serio, hacelo, así la posteo como versión 2.0
Salutes a todos y como siempre: Gracias por pasar
Me refiero a impulsó, salió, balcón, camisón, punzó, habitación, recepción, etc., que no me gusta el efecto que hace precisamente porque no es poesía, creo que mejoraría mucho si lo escribieras en presente. Todos los cuentos mejoran mucho si se escriben en presente.
Ana: Trataré de sacarles las rimas buscando sinónimos y también intentaré pasarlo al presente, pero no sé que tanto mejorará con esto último, ya veremos...
Salutes
No estoy de acuerdo en que "TODOS" los cuentos mejoran mucho si se escriben en presente. Para mí es una observación muy subjetiva.
Considero que hay que escribir en el tiempo que lo exige la historia. En este caso, se habla de un hecho que ya ocurrió, como una crónica de algo sucedido, no como algo que está ocurriendo. Por eso, si la idea es reflejar un suceso que ya ocurrió, es correcto que esté en pasado.
Si fuera en presente, creo que perdería el impacto que se le quiso dar al texto en un principio.
Saludos nuevamente.
Adrián: Tenés razón en cuanto a la primera oración del texto, ocurre lo mismo con la última, yo desarrollé el cuento en base al impacto que poduce leer esas dos premisas que fueron las primeras ideas que me vinieron a la cabeza antes de empezar a escribir la historia. Coincido en que son como muy fuertes por lo implícito de su contenido y sí, ambas expresan algo que ya pasó.
Pero igualmente, dame un tiempito y lo voy a tratar de escribir en presente, después comparamos y vemos cual queda mejor.
Salutes y gracias por las opiniones y sugerencias...
Estoy de acuerdo con Adrianófanes en que no es más que una opinión subjetiva, sin embargo eso es lo que opino, que el relato corto debe ser narrado en presente, incluso cuando nos esté contando una historia que ya ocurrió.
Yo tampoco tengo ni idea de técnicas como dice Juanba, es más, reconozco que a mi me cuesta narrar en presente. Pero bueno, a ver qué le sale.
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